Un buen día, el teléfono suena, son Nao D’Amores, una compañía de teatro admirada por La Real Lana desde hace tiempo, y a la que, de forma casual, unían hilos invisibles de familiaridad por la localidad en la que ambas nos criamos: Segovia (España).

Nos hablan sobre un proyecto que nos hace viajar en el tiempo, concretamente a la época renacentista y desean una colaboración con las fabulosas lanas merino XXL que tanto amor nos despiertan en esta marca.

Se trataba de tejer una serie de abrigos hechos a medida tanto para mujeres como para hombres. En total, ocho actores y actrices cada uno con sus peculiaridades. Y todo con mucha premura: se nos echaba la Navidad encima y el estreno estaba a la vuelta de la esquina. ¡¡Energía a raudales!!

Nos ponemos manos a la obra en precioso proyecto donde había que tejer abrigos compuestos de mangas, cuerpos y capuchas. Uno de los obstáculos con los que nos encontramos fue el peso de los abrigos (pasaba en algunos casos de 8 kg de peso) y la solución se dio adelgazando la mecha para tejer mangas y capuchas.

Un trabajo duro por la velocidad a la que se hizo, pero apenas nada cuando tejiendo todo toma forma, te vas enamorando del resultado y ves que te encanta de principio a fin.

Un verdadero placer cuando trabajas de la mano de profesionales y en especial de la directora de vestuario: Deborah Macías, ya anteriormente premiada y de sobra reconocida en su faceta,

Ya en escena, los actores integraron las piezas en la obra con entrega y profesionalidad. A decir verdad, ¡quedaba espectacular! Y como era de esperar, desde su estreno solo ha tenido buenas críticas y por ello, cabía esperar el reconocimiento de unos Premios como los que han conseguido.